Deberías Pasarte A La Banca Online

Como te he dicho en más de una ocasión, tener unas finanzas personales lo más optimizadas posible es la base de cara a construir nuestra libertad financiera. Una de las claves para sacar el máximo rendimiento a nuestros ingresos es tener controlados nuestros costes. Por un lado debemos ser muy cautelosos con nuestros costes variables, y por el otro reducir al mínimo nuestros costes fijos.

Dentro de los costes fijos, un aspecto al que la mayoría de las personas no le presta demasiada atención es el de las comisiones que nos cobran los bancos por sus servicios. Históricamente los bancos siempre han abusado de sus clientes en todo lo relacionado con las comisiones, sin embrago con el impacto que la actual crisis ha tenido sobre las cuentas de los bancos, éstos no han tardado en incrementar las comisiones y en endurecer las condiciones para que éstas no sean cobradas. Se estima que el usuario de banca se deja anualmente en comisiones en torno a 135€ de media. No sé tú, pero yo con esa cantidad puedo comer todo un mes.

LA ALTERNATIVA DE LA BANCA ONLINE

Ante esto lo primero que uno se pregunta es si existe algún tipo de alternativa a la banca tradicional con la que no paguemos ningún tipo de comisión por los productos y servicios bancarios que recibimos, y la respuesta es sí. La alternativa se llama banca online. Pero ojo, no toda banca online. Yo te recomiendo los bancos online que desde el principio te ofrecen comisiones cero. Olvídate de aquellos bancos que te exigen una condición (domiciliar nómina o recibos) para obtener cero comisiones. Además de ahorrar buscamos libertad, y está claro que si te obligan a hacer determinados cosas para obtener lo que quieres no va a existir mucha libertad.

Estas son algunas de las ventajas que ofrece la banca online  de la que personalmente soy usuario:

–          Disponibilidad 24/7/365.- Los bancos online están a tu entera disposición las 24 horas del día los 365 días del año. A través de la banca online puedes realizar tus operaciones y contrataciones en el momento en el que mejor te venga, sin tener que acogerte al horario de oficina y sin tener que hacer cola en tu sucursal habitual, dejando de malgastar tu valioso tiempo.

–          Mayor rentabilidad de nuestros ahorros.-  Por norma general, los bancos online ofrecen rentabilidades superiores en sus productos de ahorro (depósitos, cuentas remuneradas…) que la banca tradicional. Esto es debido a los menores costes que tiene la banca online, debido a que apenas tienen oficinas a pie de calle y por lo tanto su número de empleados es mucho menor, lo que le permite tener un mayor margen para hacer negocio.

–          Gran posibilidad de obtener efectivo.-  A pesar de que la banca online apenas tiene unas cuantas sucursales en pocas ciudades, la posibilidad de disponer de tu dinero en efectivo en cualquier momento es igual que en el caso de la banca tradicional. La banca online tiene firmados acuerdos con los bancos para que sus clientes puedan utilizar los cajeros de éstos para disponer de su dinero en efectivo. En España los usuarios de banca online  pueden disponer de su dinero en cualquier cajero de los grandes bancos tradicionales gracias a un acuerdo de colaboración.

MUY BIEN PERO, ¿QUÉ PASA CON LA SEGURIDAD?

Uno de los principales miedos que tienen los usuarios de banca a la hora de pasarse a la banca online es la garantía que éstos pueden ofrecer a la hora de asegurar el dinero depositado en ellos.

Aquí cabe señalar que los bancos online dedican cada año cientos de millones de euros a mejorar su seguridad. La banca online basa su negocio en la confianza que genera a sus potenciales clientes, y esa confianza pasa por garantizar una seguridad absoluta en la inviolabilidad de sus sistemas de seguridad. ¿Te imaginas que una aerolínea no dedicase recursos a revisar la seguridad de sus aviones?  Seguro que no. Pues un banco online tampoco escatima recursos a la hora de mejorar sus sistemas de seguridad. De todos modos te voy a dar una serie de consejos de obligado cumplimiento a la hora de realizar tus operaciones a través de banca online:

–          Mantén el antivirus de tu ordenador actualizado e instala cortafuegos y programas anti-spyware. Cambia tu contraseña cada 3 meses.

–          Antes de introducir tu contraseña comprueba que estas en una conexión segura (https://)

–          Nunca accedas a tu cuenta online desde un ordenador público (cibercafé) o wi-fi que no controles.

–          Recuerda que tu banco nunca te solicitará tus datos ni tu contraseña a través de correo electrónico. La mayoría de los bancos online tampoco te piden que introduzcas  todos los dígitos, sino que te solicitará sólo una parte de ellos aleatoriamente.

–          Recuerda cerrar la sesión de tu área privada cada vez que termines de realizar las operaciones correspondientes.

Así, la banca online es totalmente segura si llevamos a cabo una serie de medidas de prevención para garantizar que nadie pueda acceder a nuestra cuenta y robarnos nuestro dinero. Yo, como usuario de este tipo de banca, jamás he tenido ningún tipo de problema y sólo puedo decir que toda mi experiencia es positiva, ahorrándome al cabo del año una buena cantidad de euros que puedo dedicar a aquello que más me interese.

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Afrontar un fracaso financiero

Fracasar y fallar es parte de la vida. Los únicos que nunca han fracasado son los que nunca han intentado hacer algo fuera de su control. Así que no debes desanimarte por haber tenido un fracaso financiero o más de uno. Tus errores son oportunidades para mejorar.

Además no debes recrearte en la culpa por haber fallado, de esta forma no lo vas a resolver. Debes aprender de tus errores y buscar soluciones. Por mucho que te lamentes no vas a cambiar lo que ha ocurrido.


Así que saca pecho y toma las riendas con firmeza para buscar una solución. Piensa en tu fracaso financiero de manera positiva. Y en lugar de preocuparte lo que debes hacer es ocuparte en buscar la forma de solucionar el error.

Cómo debes considerar el fracaso financiero

El fracaso es una oportunidad de aprender

El fracaso muestra caminos que no han funcionado para alcanzar tu meta. Hay que analizar lo ocurrido y seguir adelante, aprendiendo y mejorando.

El fracaso también nos enseña sobre nosotros mismos, cuales son nuestras limitaciones, nuestros sentimientos antes una decepción, y nuestra capacidad para recuperarnos de un bache.

Si piensas en el fracaso como una oportunidad de aprendizaje sabrás sacar provecho de lo ocurrido y mejorar para el siguiente intento.

El fracaso precede al éxito

Normalmente el éxito no llega de repente. Es la consecuencia de muchas acciones, algunas que fracasan y otras que funcionan.

La persistencia y la determinación son claves para lograr tus objetivos. Ante un fracaso no puedes tirar la toalla, debes seguir intentándolo. Un buen ejemplo de persistencia es el de Thomas Alva Edison, que pese a la cantidad de fracasos que tuvo el siguió buscando el filamento correcto para la bombilla hasta que lo consiguió.

El fracaso invita a ser creativo

Un fracaso significa que la acción que has aplicado para resolver un determinado problema no ha funcionado y lo que tienes que hacer es buscar otra forma de hacerlo. Esto pone a trabajar tu creatividad para pensar distintas maneras de resolver el mismo problema.

Considera tu fracaso financiero como el problema a resolver. Si te has sobreendeudado, no has ahorrado lo que te habias propuesto, tus gastos se han disparado, ... es porque el plan financiero que estás aplicando no ha funcionado y lo que tienes que hacer es cambiarlo y pensar en nuevas formas para lograr tus objetivos.

Fracasar te hace ser mas flexible y resistente

Superar un fracaso incrementa tu poder de recuperación ante situaciones difíciles. Te da tablas para superar futuros problemas. Aprendes a tratar con los errores y fracasos y te hace ser más flexible y resistente.

Conclusión

Todo en la vida tiene un lado bueno y otro malo, y tú decides que actitud tomar ante lo que te ocurre. Solo tú decides si te hundes o si continuas adelante superando los obstáculos y aprendiendo de ellos.

Si te ha gustado este artículo te invito a compartirlo y si quieres plantearnos alguna duda o sugerencia déjanos un comentario.

¡Un fuerte abrazo!

Dinero que necesitas en cada etapa de tu vida

Una de las mayores preocupaciones actuales de las personas en lo relacionado con su futuro económico es la incertidumbre sobre si tendrán suficientes recursos financieros en los últimos años de su vida. Las proyecciones demográficas de muchos países avanzados, entre ellos España, hacen presagiar que los sistemas públicos de pensiones pueden encontrase en serias dificultades a la hora de hacer frente a las necesidades financieras de las personas jubiladas allá por el año 2050. Las soluciones que se han venido dando en los últimos años para intentar atajar dicha situación no son más que parches temporales que no solucionan el problema de fondo. Por lo tanto, cabe preguntarse si podemos hacer algo como individuos para no tener que depender en el futuro de un sistema de pensiones que, en el mejor de los casos, será raquítico. La respuesta por supuesto es SÍ. Podemos (debemos) ponernos manos a la obra cuanto antes en la construcción de nuestra independencia financiera, independencia que nos permita obtener el capital suficiente para poder estar tranquilos a medida que nuestra vida va consumiendo etapas. Por ello, es necesario que tengamos presente cuál es la cantidad de dinero que necesitamos en cada una de nuestras etapas vitales, y poder así organizar nuestro trabajo y marcarnos unos objetivos concretos que no perdamos de vista. Por supuesto la cifra de la que hablemos no es la misma para todos sino que cada persona tiene sus propias condiciones y deseos, y dicha cifra debe establecerse en función de las necesidades, obligaciones y deseos de cada individuo. Un instrumento muy útil que nos va a servir como marco de referencia para nuestro análisis es la denominada hipótesis del ciclo vital.


En el año 1965 los economistas Franco Modigliani y Albert Ando elaboran la denominada hipótesis del ciclo vital. Esta hipótesis argumenta que al individuo le interesa tener un patrón de consumo ligeramente creciente a lo largo de su vida, cosa que conseguirá trasladando capital (generando capital y ahorrando) de las etapas vitales donde sus rentas son más altas a aquellas etapas de su vida donde las rentas serán más bajas.

ETAPAS VITALES Y GENERACIÓN DE RECURSOS

Podemos dividir la vida de una persona en cuatro grandes etapas: 1) niñez/adolescencia, que abarca desde el nacimiento hasta los 25 años. 2) Juventud, que abarca desde los 26 hasta los 50 años. 3) Madurez, desde los 51 hasta los 70 y 4) ancianidad, desde los 71 en adelante. En cada una de estas etapas de la vida del individuo sus necesidades y su renta disponible serán diferentes, por lo que también lo serán sus hábitos de consumo y su necesidad de ahorro.

La etapa de niñez/adolescencia se caracteriza porque, por norma general, el individuo carece tanto de rentas salariales como de patrimonio (salvo  que reciba una herencia). Cierto es que cuando alcanza la edad legal para poder incorporarse al mercado laboral (en España son los 16 años) y obtener así su primer salario, pero por norma general son trabajos de baja cualificación con unos salarios muy bajos, por lo que la capacidad de ahorro del individuo es muy reducida y su patrimonio neto es nulo o muy reducido. Sin embargo, los últimos años de esta primera etapa de su vida son un buen momento para comenzar a establecer los cimientos de su independencia financiera, creando un pequeño capital que le permita iniciar la siguiente etapa de su vida (en donde ya tendrá mayores responsabilidades) con un colchón financiero que le permita tener una seguridad a la hora de comenzar su vida como individuo independiente. Como vimos en un post anterior, existen fundamentalmente dos grandes formas de obtener ingresos: Ganancias de capital y flujos periódicos. En esta etapa de la vida, es recomendable que el individuo ponga algún capital prestado o generado a trabajar para él y beneficiarse de la generación de ganancias de capital.

La etapa de juventud es la etapa más importante de la vida de un individuo, pues es la etapa en donde desarrollará su proyecto de vida independiente y donde creará las condiciones financieras que determinarán su bienestar en la etapa de vejez y ancianidad. Es en esta etapa de juventud donde el individuo se desarrolla profesionalmente y alcanza su mejor posición laboral, con los consecuentes incrementos salariales, pero también es donde adopta otro tipo de obligaciones (hipoteca, educación de los hijos…) que tienen una incidencia directa sobre sus finanzas personales. Su objetivo financiero en esta etapa es generar una riqueza neta positiva los más grande posible y para ello debe disponer de la mayor cantidad de activos posibles, destinando una parte importante de sus recursos a la obtención de ganancias patrimoniales que le permitan acumular capital de forma creciente aprovechándose de los beneficios de la capitalización compuesta. Tendrá gran exposición a los mercados financieros aunque siempre teniendo en cuenta su perfil de riesgo.

La etapa de madurez debería ser la etapa de la estabilidad del individuo. Si ha actuado de forma correcta durante sus años de juventud, dispondrá de una riqueza neta positiva. En estos años de vida las obligaciones financieras tienden a disminuir y a desaparecer: La vivienda se termina de pagar, los hijos ya han abandonado el hogar y tienen su propio empleo, y disponemos de unos recursos importantes que deben ser utilizados para disfrutar en su etapa de ancianidad. En lo que respecta a la generación de recursos, su principal objetivo ya no será la acumulación de capital sino su preservación, por lo que su exposición a los mercados financieros será menor. Buscará más los ingresos vía flujos periódicos, que obtendrá a través de su salario y de algún ingreso pasivo si se diese el caso (es muy recomendable). Su exposición a los mercados financieros ya no buscará  principalmente el incremento exponencial de su dinero sino que combinará esa menor búsqueda de ganancias patrimoniales con la obtención de productos financieros con intereses atractivos (bonos, dividendos…).

Por último, la etapa de ancianidad es la etapa en la que el individuo dedica menos atención a sus ingresos. Al disponer de unos ingresos menores que en las etapas de su vida anterior, destina parte de su capital acumulado en el pasado al consumo presente. En lo que respecta al rendimiento de su capital, ya no estará expuesto a productos financieros agresivos (fondos de inversión, acciones…) sino que se decantará por productos que le permitan que su dinero no pierda capacidad adquisitiva (depósitos, letras del tesoro).

Como vemos, las necesidades financieras de los individuos son muy cambiantes con el tiempo por lo que las cantidades de dinero que necesitan en un momento u otro son muy diferentes. A esto hay que sumarle las características personales de cada uno que pueden hacer que dichas necesidades financieras se acentúen en cada etapa de la vida. Pero  si hay algo en lo que todos los asesores financieros estamos de acuerdo es que los individuos que comienzan antes a tomar las riendas de sus finanzas son aquellos que toman las mejores decisiones y que menos apuros pasarán a lo largo de su vida. ¿A qué esperas para comenzar a planificar tu vida financiera?

Mandamientos sobre la libertad financiera

Es tiempo de poner nuestras ideas en orden y llevo unos días  analizando y dándole vueltas a los principios que rigen mis creencias acerca del dinero y la libertad, tanto económica como individual, que por cierto van unidas.

De vez en cuando es necesario llevar a cabo un periodo de reflexión para analizar en qué parte del camino nos encontramos, si nos hemos desviado mucho de los objetivos iniciales, si lo estamos haciendo bien o si, simplemente, nuestras creencias han cambiado y necesitamos reprogramarnos. Dentro de esta idea he repasado mis creencias y he decido compartir contigo algunos de mis principios que rigen mi relación con la idea de la libertad financiera e individual, algo así como mis mandamientos particulares.

Tengo que aclarar desde el principio que son mis mandamientos y que no le estoy diciendo a nadie que los tenga que seguir. No soy nadie para decirle a nadie lo que tiene que hacer. Intégralos en tu vida si crees que te resultarán útiles y deséchalos si no te gustan.

Los mandamientos que ves aquí no están redactados por orden de importancia, sino que están escritos conforme me han ido surgiendo en la cabeza. Así que aquí te dejo mis 10 mandamientos sobre la libertad financiera e individual:



1.- “Cuestiónatelo todo”. No des nada por seguro. Investiga y acepta sólo aquello que hayas probado y que funciona. Que una cosa sea válida para otros no significa que lo sea para ti. El mundo se rige por muchas verdades consideradas como absolutas que en realidad son erróneas. Crea tu propia realidad.

2.- “No escuches al mediocre”. El mundo está lleno de personas que dan consejos sobre cosas que ellos jamás han conseguido, y lo peor de todo, que jamás conseguirán porque nunca lo intentarán. Cuándo alguien te vuelva a dar consejos sobre cómo ganar dinero pregúntale si él lo ha puesto en práctica. Probablemente no. Escucha sólo a aquellas personas que realmente han conseguido objetivos similares a los tuyos y estudia cómo lo han hecho. Hay un trecho enrome entre el decir y el hacer.

3.- “La envidia es el deporte nacional”. Recuerda esto cada día al levantarte de la cama. Todos los días te encontrarás con alguien que intentará apartarte de tus objetivos por el mero hecho de disfrutar viéndote fracasar. Como ellos no se atreven a trabajar por conseguir lo que desean, buscan canalizar su frustración intentando hacer fracasar a todo aquel que lo intenta. Esto les reafirma en su falsa idea de que no es posible conseguir lo que uno se propone. Detecta a este tipo de personas y expúlsalas de tu vida.

4.- “El tiempo es tu bien más preciado”.  Te mueres en 50 años. El ser humano no es consciente de que tiene un tiempo limitado. Si fuese plenamente consciente de ello no llevaría a cabo gran cantidad de acciones que le ocupan muchísimo tiempo y que le reportan una baja utilidad. El dinero compra tiempo para hacer aquello que más nos gusta. Sin tiempo disponible no tenemos libertad, y sin libertad económica no existe libertad individual. Alcanzar la libertad financiera es una obligación.


5.- “La vida no es justa”. Nadie te debe nada. Puedes conocer mil formas de hacerte rico y fallar al ponerlas en práctica. Puedes ser la persona que más se esfuerza en el mundo y no alcanzar tus objetivos. Si esto te sucede no te preocupes, lo has intentado, cosa que no hará el 90% de la gente que te rodea.

6.- “Viaja”. Pero hazlo como viajero, no como turista. Olvídate de los hoteles de 5 estrellas y de las visitas guiadas. Visita lugares que no aparecen en las guías comerciales. Convive con los lugareños, vivirás mejores experiencias y será más barato. Cada año haz un viaje a la otra punta del mundo: Descubre Asia, Centroamérica o Nueva Zelanda. Ya irás a París en Semana Santa. La mayoría de las ciudades europeas se ven en menos de dos días.

7.- “Se minimalista”. Ya lo decíamos aquí, rígete por el principio de necesidad. Esto hará que puedas dedicarle recursos a lo que verdaderamente te importa.

 8.-“Rodéate de gente más inteligente que tú”. Si eres la persona más inteligente de tu entorno tienes un problema. ¿Cómo pretendes avanzar? Busca a gente con inquietudes y que tenga mayor experiencia vital que tú. Lee a Nassim Taleb.

9.- “Actúa y deja de quejarte”. Vivimos en el momento de la historia donde más fácil es hacerse rico. Hoy puedes crear una empresa líder a nivel global desde el garaje de tu casa con el presupuesto de una nómina del mes; Puedes recibir formación de las más prestigiosas universidades del mundo sin moverte de tu casa… Deja de quejarte buscando la palmada en la espalda  y actúa. La solución a tus problemas está en ti.

10.- “Haz lo que quieras”. Nunca jamás permitas que nadie decida por ti. Define tus objetivos y ve a por ellos. Si algún día te traicionas abandonando tus objetivos por presiones familiares o por el que dirán, ese día estarás muerto.

El Emprendedor

“He aprendido que el fracaso derrota a los perdedores, pero anima a los ganadores”. Joshua Aguilar



Como recordarás, hace unas semanas inaugurábamos en el blog una sección de entrevistas con personas especialistas en diferentes ámbitos relacionados con las finanzas personales y la libertad financiera. Hoy es el turno de entrevistar al emprendedor Joshua Aguilar, que ha comenzado a ser conocido hace unos meses tras la publicación de su libro, Diario Emprendedor, el cual es todo un éxito de ventas.

Joshua apenas tiene 24 años pero ya cuenta a sus espaldas con una extensa experiencia en la creación de empresas. Con sólo 16 años aprendió a manejar Photoshop, lo que le permitió adquirir una serie de habilidades que posteriormente aplicaría para diseñar sus propias camisetas que vendería en España y Estados Unidos. Este negocio le permitió obtener cierta independencia financiera, lo que le permitió abandonar el hogar familiar a los 18 años y durante unos meses se dedicó a recorrer USA. Posteriormente, Joshua desarrolló un proyecto sin ánimo de lucro enfocado a desarrollar el espíritu emprendedor entre los niños, y a escribir su libro.  Actualmente, Joshua está enfocado en la creación de su propia empresa tecnológica. Te dejo con la entrevista:



1.-  Todavía no has acabado tus estudios universitarios y ya cuentas con una importante experiencia empresarial. ¿Cuándo comenzaste a sentir interés por el mundo del emprendimiento?

De hecho acabo de terminarlos ¡por fin!

Creo que existen dos tipos de emprendedores: los que nacen siéndolo y los que se vuelven en el camino. En mi caso ha sido algo intrínseco, una necesidad constante de crear que me persigue y me termina convirtiendo en “emprendedor”.

Lo importante es esto, cualquiera puede emprender sus sueños. No importa si se nace o se hace, lo importante es que se puede.

2.- Una de tus primeras experiencias empresariales estuvo enfocada en inculcar el emprendimiento a los niños, ¿Qué consejo le darías a cualquier niño para que nunca en su vida tuviese problemas de dinero?

No creo que pueda darle consejos a un niño, eso es muy aburrido. Es mejor enseñarles a través de juegos y experiencias reales. Una de las actividades con la que más nos divertimos con los niños emprendedores fue con una venta de limonada en la playa. Aprendieron con la experiencia de crear y vender algo, no con los consejos

3.- Financieramente hablando eres autodidacta, ¿Cómo crees que se podría atajar el enorme problema de la falta de cultura financiera en España?

Tengo un grado en Comercio por la Universidad Complutense de Madrid. Pero, de la misma forma que con los niños,  a ser empresario se aprende con la práctica (siendo autodidacta). Creo que todo el mundo necesita educación financiera, y esta se adquiere a través de libros, congresos, videos, etc. El problema realmente no es la falta de cultura financiera, sino la falta disciplina para aprender.

4.- Cuando tenías 22 años tanto tú como tu familia tuvisteis serios problemas económicos, e incluso tuviste que abandonar la residencia universitaria en la que vivías. ¿Cómo te sobrepusiste a la adversidad de haberte quedado sin dinero?

Viéndolo con retrospectiva no fue tan malo realmente, creo que son experiencias muy buenas para la vida. Las fuerzas surgen del apoyo de tus verdaderos amigos que están contigo en las malas y en la confianza en uno mismo. Eso y saber que tarde o temprano los puntos se conectan para todas las personas que trabajan duro


5.- ¿Cuál crees que es la clave del éxito financiero?

Disciplina.

Ahora mismo me estoy preparando para el primer triatlón olímpico de mi vida. Tengo que entrenar duro todos los días (sobre todo porque soy un novato en estos temas). Estos entrenos físicos no soy muy diferentes de la disciplina que se necesita para tener éxito financieramente ya que se requiere de un esfuerzo diario para trabajar duro. La cruda realidad es que al final son más los que renuncian que los que fracasan, y eso hace la diferencia.

6.- ¿Qué le dirías a todas aquellas personas que a día de hoy se quejan de la falta de oportunidades?

Les diría que las oportunidades no se ven con los ojos, sino con la mente. Que no pierdan su tiempo en quejarse, sino en educarse.

7.- ¿Qué lecciones crees que podemos sacar de toda esta crisis para gestionar mejor nuestro dinero en el futuro?

Que las crisis van y vienen, y nos demuestran que no existe la “seguridad laboral”. Lo que hoy es, puede que mañana no lo sea. Les diría lo mismo que Robert Kiyosaki dijo a través de mi libro: “Cada uno de nosotros tiene el control sobre una solo cosa: nosotros mismos”.

8.- Por último, ¿qué tres libros son los que más te han influenciado en tu carrera como emprendedor e inversor?


Padre Rico, Padre Pobre– Robert Kiyosaki

La Biblia

Self-Reliance– Ralph Waldo Emerson

Alcanzar El Éxito Financiero

Hoy quiero darte mi opinión acerca de un tema que creo que es de vital importancia para poder disfrutar de una vida plena. Ese factor no es otro que el éxito. Pero no voy a centrarme en definir qué es el éxito porque como podrás intuir cada persona tendrá su propia definición y su propia idea de en qué consiste el éxito. Lo que voy a hacer es intentar dar algunas ideas básicas sobre cómo hacer que cada uno de nosotros podamos crear nuestro propio éxito. Dicho éxito se puede conseguir en múltiples facetas de nuestra vida, sin embargo permíteme que en este momento me centre en hablar del éxito en la temática relacionada con este blog, es decir, en hablarte del éxito en el ámbito profesional y financiero, y que sea más fácil alcanzar la libertad financiera


Si te das cuenta, la gran mayoría de las personas no se encuentran plenamente satisfechas con la actividad profesional que realizan. Obviamente es muy difícil que una persona se encuentre a gusto al 100% porque siempre habrá aspectos del trabajo, por mucho que éste nos guste, que no serán de nuestro agrado. Sin embargo cada vez es más frecuente ver casos de depresión vinculados a problemas laborales y a insatisfacciones en lo profesional. No hace falta ser un gran psicólogo para darse cuenta de esto. Sólo hace falta echar un vistazo a nuestro alrededor todas las mañanas en el tren o en el metro de camino a nuestro puesto de trabajo. Las caras de malestar de la gente que va a trabajar son un poema.



¿Por qué ocurre esto? Pues porque en el fondo la gran mayoría de las personas trabaja en algo que no les agrada, sólo por dinero. Ojo que con esto no quiero decir que el que trabaja en algo que sí le apasiona no le importe el dinero, le importa y mucho, y por ello obtendrá mucho más que la persona que trabaja a disgusto, porque podría dedicarle horas y horas a lo que hace ya que le encanta, ¡incluso estaría dispuesto a trabajar sin cobrar! Es más, la persona que trabaja en aquello que verdaderamente le apasiona no piensa en el dinero, sino sólo en desarrollar esa actividad que para él es como un hobby remunerado. Como consecuencia el dinero llegará y no en cantidades pequeñas.


La realidad es que con el paso del tiempo nos damos cuenta que tanto el sistema educativo como la presión social han hecho muy bien su trabajo. Me explico, el sistema educativo tiene como misión dirigir desde la cuna a los futuros adultos por el camino que recorre el 90% ciento de la gente. Nos inculcan la idea de que obteniendo nuestra titulación universitaria obtendremos la tan anhelada seguridad: Puesto de trabajo fijo y prestaciones sociales para el resto de nuestros días. Como ya habrás descubierto, dicha seguridad no existe, y es bueno que así sea porque es el único modo de que el individuo saque su máximo potencial de sí mismo.


A día de hoy existe una sobre oferta de titulados universitarios, lo que hace que por un lado no se creen puestos de trabajos para todos ellos, y por otro, que al existir tanta oferta de licenciados, los salarios tienden a reducirse. Por otro lado, la presión social que vivimos desde pequeños nos empuja a caer en el la maldición de la posesión, principalmente de una casa, lo que hace que nada más iniciar su carrera profesional muchas personas se hipotequen durante 30 años viéndose obligados a trabajar en lo que sea para pagar una deuda que ellos mismos fueron a solicitar.

DETERMINA CUÁL ES TU PASIÓN

Para alcanzar la plenitud profesional y como consecuencia directa la obtención de grandes cantidades de dinero por tu trabajo, obviamente debes detectar cuál es tu pasión, es decir, aquella actividad monetizable y rentable (que se pueda ganar dinero con ella y que éste sea suficiente para cubrir tu nivel de vida) que te motive a levantarte cada día con una sonrisa y que te permita disfrutar plenamente de tu trabajo.

Para ello te recomiendo que apliques un método que suelen aplicar los departamentos de marketing de las empresas, que no es otro que el determinar tus fortalezas y tus debilidades. Coge un papel y divídelo en dos columnas, en una de ellas escribe todas tus fortalezas y gustos, es decir, todos los puntos fuertes de tu persona, tanto laborales como personales, y aquellas aficiones y actividades que te gusten. No importa que no estén relacionadas con tus estudios o experiencia laboral, puede que siempre te haya gustado dibujar, montar a caballo o hacer surf. Lo que sea escríbelo.

En la otra columna escribe aquellos aspectos de tu personalidad que consideres una debilidad y todas aquellas actividades que has realizado y que no deseas realizar jamás. Bien, a partir de ahora olvídate de esta última columna y céntrate en la columna de tus fortalezas y gustos, ya que será de la combinación de estas dos cosas de la que saldrá la actividad que te apasiona. A partir de ahora has decidido disfrutar de tu actividad, y ello implica que no vas a dedicar ni un solo día más en tu vida a aquello que no te gusta. Desde ahora y para siempre enfócate en desarrollar tus fortalezas y olvídate de tus debilidades. Esto hará que seas coherente y que tu potencial audiencia, tus potenciales clientes, te perciban como alguien en quien confiar. La coherencia en los negocios lo es todo, ya que si no crees en tu propio producto se notará mucho, y nadie compra nada en lo que el vendedor no cree.

DISEÑA TU MARCA PERSONAL

Desde ahora debes considerarte a ti mismo como un producto, de hecho eres un producto. Una vez que hayas determinado cuál es tu verdadera pasión realizable, monetizable y rentable que te permita vivir de aquello que realmente te apasiona, debes ser el director de marketing de tu producto, es decir, de ti mismo.

Lo primero que debes hacer es crear un producto de calidad entorno a tu pasión. Independientemente de que tu pasión sea trabajar por tu cuenta de lo mismo que trabajas ahora o que sea irte a vivir a una isla paradisíaca y abrir allí una escuela de surf, lo que ofrezcas debe ser de calidad. Nadie obtiene éxito durante mucho tiempo ofreciendo productos o servicios mediocres. Hoy en día la competencia es brutal (probablemente ya haya gente en alguna parte del mundo que se dedique a lo que te quieres dedicar tú) por lo que debes llevar a cabo una formación continua en tu campo der trabajo, primero por ti, porque ofertaras un mejor servicio y tendrás un mayor conocimiento del sector, lo que hará que puedas innovar y ganar a tu competencia. En segundo lugar, por tus clientes, que te verán como una persona que se toma en serio su trabajo, lo que te dará autoridad en tu mercado.

Lo siguiente y más importante es posicionarte como experto en tu nicho de mercado, en tu sector. Esto requiere mucha disciplina ya que volverse un referente en cualquier sector requiere un trabajo arduo, de muchas horas al día y de muchos meses de trabajo sin recibir un solo euro de remuneración. Esta es la parte más delicada de tu nueva etapa ya que es en donde más gente abandona. Como ya te he dicho en más de una ocasión, el ser humano está programado para querer las cosas lo antes posible, y la ansiedad ante la falta de resultados hace que muchas veces se abandonen proyectos justo en el momento en el que están a punto de despegar en lo que a rentabilidad se refiere. Desde ahora hazte un experto en marketing online y estudia formas de convertirte en un referente en internet.

En definitiva, crear tu propio futuro entorno a tu verdadera pasión es absolutamente posible, pero requiere mucho esfuerzo y dedicación. La clave de todo ello está en la perseverancia y en tener unos objetivos claros e inquebrantables. Debes tener bien claro qué es lo que quieres, qué objetivo buscas con todo esto. Por otro lado debes tener la convicción de que lograrás tu objetivo y un plan de acción ganador que te permita alcanzar el éxito. Márcate pequeñas metas intermedias que puedas ir tachando hasta alcanzar el objetivo final, y sobre todo no te enfoques en el dinero, si haces lo que realmente deseas éste llegará.

El tema de la marca personal es un tema apasionante, pero por desgracia es un campo tan amplio que es imposible ni siquiera realizar un resumen bueno en tan poco espacio, sin embargo si quieres profundizar en el tema te recomiendo dos libros:

– “Tu marca profesional. Conecta tu profesión con tu pasión” de Fabián González H.

– “Expertología”. Andrés Pérez Ortega.

Por último quiero compartir contigo dos videos que hablan del éxito. El primero es el video de un joven español que en su momento se convirtió en un video viral al hablar de lo que es para él el Éxito. Luzu, así se llama, pudo ver cumplido su sueño que es poder vivir de los videos que cuelga en youtube.

El otro es un video muy interesante que invita a la reflexión acerca de qué importa en nuestras vidas. Espero que los disfrutes.